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La doctora Esther López García es presidenta del Observatorio de la Nutrición y de estudio de la Obesidad de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN). Como explica, su labor consiste en monitorizar “la situación nutricional de la población española y llevar a cabo la vigilancia epidemiológica de la obesidad y sus factores determinantes”.

Además, desde la Estrategia NAOS también se promueven actuaciones e iniciativas que tienen como objetivo la promoción de hábitos de vida saludables, mediante el seguimiento de una dieta saludable y el fomento de la actividad física.

“En este sentido, es fundamental continuar trabajando en la construcción de entornos que promuevan y favorezcan opciones de consumo de alimentos saludables y sostenibles. Debe hacerse una especial incidencia en el entorno educativo y familiar y comunitario, protegiendo a la infancia y adolescencia de la presión de consumir alimentos no saludables, desde un abordaje multifactorial y multidisciplinar, reforzando el conocimiento y el poder de decisión de los ciudadanos para lograr un cambio de hábitos de consumo”, recalca.

 Reforzar el conocimiento de los ciudadanos logra un cambio de hábitos de consumo

Las líneas de trabajo son diversas. Entre otras, destacan el control de la calidad nutricional de los menús en colegios, dentro del Plan Nacional de Control Oficial de la Cadena Alimentaria y las políticas de reformulación de alimentos y de mejora de la oferta alimentaria en establecimientos de restauración.

“Además, se ha elaborado una guía de recomendaciones dietéticas saludables y sostenibles complementadas para la población española, para promover una dieta saludable y medioambientalmente sostenible y la práctica de actividad física para alcanzar un estado de salud óptimo en la población española. Puede consultarse en este enlace. Y, como añade, se trabaja en colaboración con otras administraciones “para identificar y desarrollar otras medidas que puedan contribuir a mejorar el acceso a una alimentación saludable bajo criterios de igualdad”.

Uno de los trabajos más relevantes en el que participa es Estudio ALADINO 2023, que permite conocer el estado nutricional de los niños de 6 a 9 años en nuestro país. Este estudio se desarrolla en colaboración con los colegios y familias y, en la actualidad, se está terminando de analizar los resultados.

Control de la obesidad

Como explica, se llevan a cabo mediciones directas “para determinar peso y talla. De esta forma, podemos conocer la prevalencia de sobrepeso y obesidad de la población infantil, y también ver cómo va cambiando a lo largo del tiempo. Esto es de gran interés, porque permite comprobar si este problema de salud se va controlando (las cifras van disminuyendo)”.

De hecho, se acaban de presentar los últimos resultados de este trabajo. Uno de los datos más destacados es que la tasa de exceso de peso infantil en España se situó en el 36,1% en 2023 ante al 40,6% que hubo en 2019. “A pesar de este buen dato global, los datos indican que este descenso apenas se ha dado en niños y niñas que pertenecen a familias con ingresos brutos inferiores a 18.000 euros anuales.

En este grupo, los índices de sobrepeso y obesidad se mantienen estables desde 2011, cuando se hizo el primer estudio. Esta realidad es una de las que refuerzan la necesidad de actuar desde las administraciones públicas para garantizar una alimentación saludable en la infancia”, subraya.  

Más alimentos saludables

La doctora López señala también que se están haciendo “muchos esfuerzos por concienciar a la población -y, en particular, a la comunidad educativa- de la importancia de llevar una alimentación saludable, sostenible y variada. En 2023 se lanzó esta campaña El comedor escolar #LaAsignaturaPendiente. Este año está dedicada al fomento del desayuno, almuerzo y merienda como ventanas de oportunidad para introducir alimentos saludables como la fruta, los cereales integrales, los frutos secos o la leche y reducir el consumo de alimentos procesados con alta cantidad de azúcar, sal o grasas saturadas entre la población infantojuvenil.

Se están haciendo muchos esfuerzos por concienciar a la población de la importancia de llevar una alimentación saludable, sostenible y variada

Además, de la tramitación de Real Decreto de comedores escolares, considera que hay otras políticas que pueden ayudar a conseguir este objetivo. Entre otras, cita “la regulación de la publicidad de alimentos y bebidas no saludables dirigidas al público infantil, en la que ya trabaja el Ministerio y ofrecer alternativas de alimentos saludables en lugares como centros de ocio y centros sanitarios”.

Tres ideas para el futuro

Respecto al futuro, considera que hay tres ideas que vertebrarán la alimentación saludable. La primera “es que sabemos que un patrón de dieta habitual, mantenida a lo largo de los años, es el que produce un efecto beneficioso (o perjudicial) en la salud. Por ello, las dietas ‘milagro’ de semanas de duración no son capaces de producir efectos beneficiosos en la prevención de enfermedades crónicas”. 

En segundo término, ya que cada persona elige qué alimentos incluye en su dieta, de acuerdo con sus preferencias y cultura, “debemos promover que estas elecciones tengan un elevado contenido en alimentos de origen vegetal”.

Por último, insiste en la idea de que la dieta “tiene que ser sostenible, es decir, que los alimentos consumidos se produzcan de forma que no causen perjuicio al medio ambiente”.

Estas ideas están recogidas en las Guías Alimentarias para la Población Española, de diciembre de 2022, que proponen consejos de alimentación que permiten seguir una dieta saludable a la población general, basados en las características culturales de nuestro país. Además, como recuerda la doctora López, “se dan sugerencias para conseguir incorporar estas recomendaciones a la vida diaria”.

Esther López García es catedrática del Área de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid. Es profesora de Epidemiología en los grados de Medicina, y Nutrición Humana y Dietética. Su área de investigación es la prevención del envejecimiento no saludable mediante la dieta y los estilos de vida, en el ámbito de la epidemiología poblacional. En particular, su trabajo ha ayudado a caracterizar exposiciones dietéticas relacionadas con el desarrollado de deterioro de la función física, pérdida de audición, riesgo de caídas, fragilidad y multimorbilidad. Es miembro del Grupo de Nutrición de la Sociedad Española de Epidemiología.

Javier Granda Revilla es periodista freelance especializado en salud con más de 25 años de experiencia. Colabora con El Mundo, Diario Médico, Telemadrid, La Razón, El Médico Interactivo y Muy Interesante, entre otros medios. Es vicepresidente de la Junta Directiva de la Asociación Nacional de Informadores de Salud (ANIS), institución que agrupa a más de 600 comunicadores de salud, que le concedieron el Primer Premio a la Mejor Labor de Comunicación.

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